Mermelada de Naranja Eco De Eco-Melar 300 gr

Mermelada de Naranja Eco De Eco-Melar 300 gr

Mermelada de Naranja Eco De Eco-Melar 300 gr

Peso: 300 g
Agroecológico
Kilómetro 0
Precio: 3,90€

Aunque la mermelada de naranja puede ser un clásico en la tradición andaluza, la que se elabora en la cooperativa de Aljaque adquiere valores añadidos que la hacen distinta. La calidad de la fruta, cultivada en el Parque Natural de Sierra de Grazalema y de procedencia ecológica, la receta tradicional que se utiliza para elaborarla y el punto de maduración en el que se recogen estos cítricos son algunos de los pilares sobre los que se sustenta esta magnífica confitura artesanal. No debe faltar en un buen desayuno con tostada y mantequilla, aunque desde el punto de vista culinario tiene muchas más aplicaciones, en especial, en la elaboración de postres o acompañando a masas quebradas o dulces con crema pastelera. También puede combinar bien con platos de carne.

 

La Cooperativa Al-Jaque fue creada en 1.997 con el fin de posibilitar el auto-empleo a mujeres en una zona rural como Montejaque, que ofrecía pocas oportunidades a este grupo de la sociedad. Desde entonces en este pueblo, ubicado en el Parque Natural de la Sierra de Grazalema, se lleva a cabo la producción artesanal de productos agroalimentarios y de licores de fruta. La cooperativa ha ido desarrollando y ampliando los fines comunes que el grupo de mujeres quiere representar con su trabajo diario en su propia empresa.

El respeto al medio ambiente, especialmente teniendo en cuenta el entorno donde se ubica, ha llevado al desarrollo de una gama amplia de productos ecológicos certificados por la Asociación CAAE (Asociación de Comité Andaluz de Agricultura Ecológica) y la concesión de la Marca “Parque Natural de Andalucia”. Además, todos sus productos han obtenido la Calidad Certificada de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía.

Los productos ecológicos representan para esta cooperativa andaluza nuevos parámetros de calidad. Así, respeta el medio ambiente, el bienestar animal y mejoran la fertilidad de los suelos, mediante la utilización óptima de recursos, sin el empleo de productos químicos de síntesis, asegurando la trazabilidad y la seguridad alimentaria. Posibilitan el sostenimiento e incluso el desarrollo de las zonas rurales, de las costumbres populares y de los valores culturales.